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Madrid versus Londres
Hoy luce el sol en Madrid. Pero ayer (que es cuando quise publicar esto y los ciberduendes se opusieron) cayó una tormenta apocalíptica. Con truenos tremebundos y relámpagos grandiosos. Me gusta que llueva en Madrid. La vegetación da palmas durante varios días a cada gota de agua, las hojas lavan la contaminación y brillan como si las hubiesen bruñido, y la gente deja de hablar de sequía por unas horas. Este año, incluso por unas semanas. Porque llevamos una primavera húmeda. Observen si no el tronco de la acacia que hay delante de mi casa. ¿A qué parece un tronco de cualquier jardín umbrío norteno? Con su lado norte cubierto de musgo. Algo insólito. Esto observábamos mi camaruca y yo desde la ventana de la cocina mientras se cocinaba la foto.
Cerré la ventana y me di la vuelta. Y entonces reparé en lo que véis en la segunda foto. Mi paño de cocina. Con el plano del metro de Londres estampado. Como yo con una cámara en la mano tengo más peligro que un chiflado en un campus americano, pues... fuego a discreción. Le disparé también. Y pensé en la cantidad de tiempo que hace que quiero ir a Londres, ver a mi hijo en su salsa y en su escuela y en sus teatros (anda de estreno estos días), invitarlo a cenar a un "restaurante típico inglés", como él llama a los restaurantes indios..., tal vez conseguir también que Elsinora levante las posaderas de la silla de trabajo... El refrán se hizo hombre y acampó entre nosostros, me dije: "si Mahoma no va a la montaña, viene la montaña a Mahoma". Si yo no voy a Londres, Londres viene a mí. Ahí está. A ambos lados de mi ventana.
Post Data.- Tengo tres paños como éste. Uno lo compré en Londres en plan souvenir, en una tienda de eso mismo, pensando que sería un chistecito y punto. Y resultó ser el mejor algodón del mundo, el más fino, el más resistente, el que no suelta ni una fibra, el mejor que tuve en la vida. Enterado de ello mi hijo me trajo otro. Enterado de ello un amigo me trajo otro. Aún así el más nuevo tiene no menos de 4 años. El más antiguo, 7. Fijaos si son buenos, que ahí siguen, en uso continuo desde entonces, y resistiendo como unos campeones. Quiero más. No miro a nadie.
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Publicado por Bubela el 18 de Abril, 2007, 12:35
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