Me he pasado el día en la calle, acabo de llegar y rápidamente os pongo aquí un regalito porque no quiero que el
Día del libro se me pase sin mostraros una pequeña joya. De pequeña tiene poco porque el librito se las trae. Está encuadernado a mano, en pergamino. Escrito un par de siglos después de que el señor Guttemberg contribuyese con su invento a darnos tantas noches en vela, tanto relax y placer en vacaciones, en los días de lluvia y en cualquier otro momento en que estemos dispuestos.¿Hay algo mejor que estar metidita en la cama, con un buen libro, mullidita, calentita, con tu contiguo -además- calentándote los pies ( o una bolsita de agua o de semillas, en su defecto ) y leyendo a su vez, mientras escuchas el silbar del viento tras las ventanas y la lluvia golpeando los cristales?.
Hay otro libro, que está manuscrito y cuenta la historia de una finca de aquí, la cual es ahora propiedad municipal. En estos momentos está siendo utilizado, así que en cuanto vuelva al hogar os lo enseñaré tambi

én.