Esta foto ya la publiqué en otra ocasión. Alucinada con que lo que yo había visto hace ahora 11 meses en Santa María la Mayor era algo más que un espejismo. Alucinada con que la Santa Iglesia "Pre-romana" que tanto poder y posesiones lleva acumulados y aún lleva y aún acumula tantos siglos después de que su fundador echara a los mercaderes del templo (tomo aire) alucinada, decía, de que hubieran vuelto a legitimar las misas tridentinas.

Pues no sólo las han legitimado. El mismísimo Equis Bi (el copy del mote es de Érix y cia) se ha marcado una de estas misas ayer en la mismísima Capilla Sixtina y ha hecho que lo retraten bien retratado (de culo, naturalmente), y a mí lo que más rabia me dio del asunto es que yo no hice ni una foto en la Sixtina, y hasta escondí la cámara para no dar ideas a nadie (por aquello de no estropear las pinturas). Ni fotos sin flash siquiera. Tonta. Y ni un sólo flash disparé en el Vaticano entero ni en una sola de las iglesias de Roma, y son casi 500 (todas ellas propiedad del Vaticano, que lo sepáis, que pa'eso Equis Bi es obispo de Roma también). Tonta yo. En lugar de hacerle caso a mi madre que entre flipe y flipe mascullaba que aquel lujo era una indecencia mientras se morían de habre y de sed millones de personas, y que había que venderlo ¡ya! Pues eso. Que yo escondiendo la cámara y Equis Bi venga de despliegue de luminaria para presentar su misa último modelo. Último modelo secular (que no es seglar exactamente): la misa de espaldas al pueblo.

Esta noche Buenafuente intentó hacer su monólogo de espaldas al pueblo también... pero no le salió. Y es que le faltan 20 siglos de ensayos, me parece a mí. Porque salir, salen.

Vaya si salen.

Qué cosa más triste. El día más feliz de tu vida viendo los culos de un cura y un monaguillo. El novio ya renunció a mirar nada más que sus propios zapatos. Pero la novia aún acepta alternativas a los culos: Uno: la imagen de un moribundo en plena tortura. Dos:  la imagen de la madre del torturado que ve cómo torturan al hijo.

Todo ello carisísimo, eso sí. Los culos también.

Por cierto, esta foto es de estrangis (algo me resarcí). Sin flash, por supuesto, pero de estrangis. Tremendo cartel en la entrada (es una capilla lateral de la Iglesia) prohibiendo fotos y un tipo mafiosillo vigilando que se cumpliera lo que el cartel decía. Pero en invierno las prendas son amplias y en la actualidad las cámaras pequeñas...